sábado, 4 de febrero de 2012

Ya vale de alertas

Alerta por lluvias.... y va y llueve.
Alerta por calor.... y va y hace calor.
Alerta por nieve.... y va y nieva.
Alerta por viento.... y va y hace viento.
Alerta por frío.... y va y hace frío.
Que aciertan cuando alertan está claro, pero que nos haga falta que antes de salir de casa nos avisen del tiempo que va a hacer marcándolo con un titular de ALERTA, me parece exagerado.
Cuando llegue de verdad algo peligroso y duro, ¿con que tipo de alerta nos van a insistir, y de que color?
¿No os recuerda esto el típico cuento de Pedro y el Lobo?
Además la gente que se lo cree vive en permanente tensión cuando uno de esos avisos se lanza por los medios, y pase lo que pase al andar por la calle va rezando.
Ya vale de alertas...

miércoles, 1 de febrero de 2012

Lo que la gente opina

Cuando hablo con amigos y compañeros de temas sociales, veo que prácticamente todos opinamos los mismo.
Si hablamos de la situación económica todos creemos que esto lo empezaron los bancos porque nadie supo ponerle freno a su avaricia. Una vez montada la pirámide nadie se atrevió a salirse, porque era quedar fuera de los beneficios.
Seguro que más de uno entre los economistas y banqueros se dieron cuenta de que esto tenía pinta de ser algo tan peligroso como las arenas movedizas.
Pero todos estamos de acuerdo también en que la forma de solucionarlo inyectando dinero a espuertas en los mismos bancos es muy inquietante, sobre todo si no nacionalizas o compras la mayoría suficiente de acciones del banco para evitar que en cuanto tenga el dinero vuelva a las andadas.
De hecho han vuelto a las andadas, con el dinero que se les ha ingresado han comprado tesoro público y así ganan un buen pellizco sin menearse y usando dinero que no es suyo.
Que al hablar los colegas y yo tengamos las mismas opiniones es de sentido común, pero que los políticos no sean capaces de pensar lo mismo que nosotros ya es algo más grave e indica que en cuanto se hacen políticos viven en otro planeta y desconocen lo que pasa en la calle.
¿Y si no sabes lo que pasa como puedes solucionarlo? Pues no puedes.

El plan E de estupidez mayúscula

El famoso plan E del sr. Zapatero, trajo innumerables obras por todo el país.
La idea no era mala, pero la ejecución fue pésima como casi todo hoy en día.
Creo que la idea era mantener unos niveles de ocupación en obras públicas, supongo que con la coletilla de "para trabajadores en España".
Pero la realidad fue que los ayuntamientos acostumbrados a tener que quemar los últimos cartuchos de dinero al final del periodo (porque si devuelven lo que les sobra estaría mal visto y los siguientes presupuestos podrían verse decrementados en lo que devuelven), se inventaron obras tan extrañas e innecesarias que da hasta vergüenza.
Luego la burrocracia hizo que la tramitación y el letrero de las obras fuese más caro que la subvención al mismo proyecto. Es decir vender la moto para comprar gasolina.
Pero aún había algo peor que contradecía el mismo espíritu del plan.
Gran parte de las empresas echaron a los trabajadores españoles y contrataron extranjeros.
Si estuviesen empadronados no pasaría nada, pero si la gente que trabaja viene de fuera, no se empadrona, no vive aquí, pero esquirola el trabajo a los que si viven aquí, entonces algo no va bien.
Todo esto se podría haber evitado con un buen control a las empresas que realizaron los trabajos.
Si se las hubiese controlado se podría haber influido incluso en que en vez de usar una máquina y dos obreros, usasen 5 obreros para el mismo trabajo. Lo que interesaba era dar trabajo...¿o no? ¿o lo que interesaba era dar beneficio a los empresarios de obras públicas y darse publicidad por toda España?

Como volver a disponer de trabajo en Europa...

Pues no hay que ser un sabio para pensar que 20 millones de puestos de trabajo se han ido a China y Asia en general.
La forma de volver a disponer de esos 20 millones de puestos de trabajo es incrementar con altísimos aranceles las importaciones hacia Europa.
Parece una locura que los empresarios mandasen sus producciones a China pensando en el beneficio inmediato, y no viendo que todos esos puestos que eliminaban de aquí eran posibles clientes que tachaban de su lista o de la de otros empresarios.
Pero funcionó bien hasta que todo el mundo hizo lo mismo. Y entonces se produjo la debacle.
Ya no quedan casi clientes porque están en el paro, los que quedan están amedrentados y las ventas también se resienten de eso.
Además el gigante asiático ha sabido jugar con las empresas y todo el que lleva allí su producción es ahora consciente de que en muy poco tiempo tendrá copias perfectas de sus productos vendiéndose al lado de las suyas a mitad de precio.
No parece que el código de honor y de conducta que rige en occidente y en Japón funcione igual en China.

jueves, 6 de noviembre de 2008

- De expertos a tontos útiles...

Hoy en día en muchos trabajos están convirtiendonos a los trabajadores en tontos útiles.
Y me explico.
En vez de prepararnos técnicamente o intentar implicar en la empresa a los trabajadores, se prefiere mantener sin más formación que la inicial al personal y hacer que los procesos no necesiten conocimientos, dejando que unos pocos y normalmente externos sean los que proporcionan esos conocmientos.
Vuelvo a explicarme con un caso diario.
Cuando una persona quiere trabajar como mecánico en un taller oficial, le pedirán el título pertinente, pero una vez que esté trabajando, dejarán de formarle, porque las piezas vienen ya montadas o premontadas y para encastrarlas no hace falta conocimientos extraordinarios.
Eso provoca que cuando llevamos el coche a reparar se dediquen solamente a "meterlo" en el ordenador, que indicará que piezas hay que sustituir.
Después se piden las piezas y cuando llegan se sustituyen.
Pero hemos perdido las posibilidades que nos brindaban los mecánicos expertos que revisaban la pieza y veían donde estaba el problema encontrándolo a veces a cierta distancia de donde fallaba, cosa que un ordenador no es capaz de hacer.
La sensación de los que son usados de esa manera, es la de ser solamente piezas de un puzzle, sin nada que aportar.
Sienten que se desperdicia su capacidad y de ahí a sentirse tonto hay poca distancia.
Por eso digo que hemos cambiado expertos por tontos útiles.

martes, 28 de octubre de 2008

- La ley...del mas fuerte

Cuando en estos días vemos en la televisión y los periodicos que han condenado a un fulano a 20 años de carcel por un asesinato todos solemos terminar el comentario diciendo: "y en 3 años en la calle".
Y no nos falta razón.
Ni yo ni mucha gente de la que conozco entendemos porque se condena a la gente a un millón de años si luego se les van a aplicar beneficios por diversos motivos y se va a quedar en una docena.
Lo lógico desde nuestro punto de vista sobre todo en delitos en los que no se puede resarcir al finado ni a su familia es que directamente condenen al asesino a 12 años de carcel sin más.
¿Cómo pueden ir con la cabeza levantada los legisladores y los jueces que aplican esas leyes ingratas e injustas?.
Al final quien tiene dinero y poder no consigue solo que se le minimize la pena, sino que se alargue y alargue hasta que el juez que le conviene llegue a la rueda de decisiones sobre su sentencia y ahí si que echan a correr.
Pero la gente normal que no disponemos de medios, estamos vendidos literalmente.
La justicia no solo no es ciega, sino que es tendenciosa.
El tiempo siempre juega a favor del poderoso y del rico.
Nosotros no podemos pagar abogados trifulcadores, enrevesadores ni a procuradores que nos procuren que nuestro expediente suba puestos o se pierda...
Si al menos la informática nos ayudase, pero resulta que los juzgados no tienen suficientes ordenadores. Seguro que si cada persona que trabaja en los juzgados trajese los equipos que le sobran de su casa llenarían todas las salas con equipos informáticos.
Incluso las tiendas pequeñas tienen un equipo adecuado a su trabajo, incluido el software.
¿No será que no interesa?

jueves, 23 de octubre de 2008

- Sentido común y tráfico.

El sentido común es una herramienta que nos debería servir a todos para adaptarnos a las distintas situaciones que se nos van a presentar durante toda nuestra vida.
Por desgracia los poderes públicos necesitan que la masa se aborregue para poder manejarnos más cómodamente sin que nos revelemos constantemente.
Y entre otro métodos que supongo que habrán usado, voy a describir lo que sucede en el tráfico.
Cuando nos movemos por la ciudad, cada vez más incómoda para los coches, nos encontramos ante innumerables semáforos.
Un semáforo cuando resulta imprescindible nos ayuda, pero el 90 por ciento de ellos están de más y me explico.
Cuando en un cruce de calles alguno de los vehículos no dispone de visibilidad o no se le ve a él, entonces es imprescindible.
Cuando los peatones tienen que cruzan la calzada con cuatro o más carriles o en zonas de alta velocidad, entonces es imprescindible.
Pero el resto de los semáforos están de más.
Si nos paramos en un semáforo es porque la luz está en rojo, cuando se poner verde es nuestro turno y pasamos incluso empujando a bocinazos a los peatones que queden rezagados.
Sin embargo si lo que encontramos es un paso de peatones o un ceda el paso, circularemos más reposadamente sabiendo que podemos encontrarnos obstáculos pero sabiendo también que podemos continuar la marcha en cuanto los superemos lo que al final redunda en una distancia mucho mayor de recorrido, no hay tanto estress al conducir y se mejora nuestro sentido común.
Fuera de las ciudades, en los pueblos, hay muy pocos semáforos y la gente conduce más razonablemente.
No nos fijemos en los anormales (no normales) que son una minoría tan diminuta que no hace falta ni contar con ellos.
Eso es un problema para comentar a parte.
Sentido común paso de cebra y ceda el paso.
Falta de sentido común, robotizados, semáforos.